Hoy en día, a pesar de la crisis económica que afecta al mundo entero, sigue habiendo negocios en auge y su “aparente éxito” invita a que muchos emprendedores sigan los mismos pasos. Pero como ha pasado en otras ocasiones, “torres más altas han caído” y cuando eso sucede siempre es necesario hacer una profunda reflexión para saber explicar muy bien los motivos por los que eso se ha producido esa caída, y evitar de esta forma que vuelvan a producirse en el futuro.
Sin irnos muy lejos, pregúntate qué pasó con aquellas tienda de ‘Compro Oro’. Al calor de la especulación con el metal precioso y de las necesidades financieras de muchos españoles, crecieron a un ritmo muy acelerado. En la actualidad, muchas de ellas mal viven por la caída en la cotización del oro, por la falta de clientes y por su elevada inversión.
Sin embargo, en este momento uno de los negocios en auge que más se puede ver por la calle es el cigarrillo electrónico. Un negocio anticrisis, porque ya sabemos que los vicios son difíciles de dejar y el tabaco está muy caro. Pero cuidado, porque, como se suele decir en finanzas, “compra con los cañones y vende con los violines”, ya que en los mercados financieros es muy habitual que un valor caiga tras un rally alcista que parecía no tener fin. Así que en las próximas líneas vas a poder leer unos consejos para que no pierdas tu inversión en alguno de las empresas que existen hoy en día:
- «Rentabilidades pasadas no aseguran rentabilidades futuras”. Frase típica de los folletos informativos de Fondos de Inversión, pero que nunca tienes que olvidar en el mundo de los negocios. Que a una empresa le haya ido bien no quiere decir que le vaya a ir bien en el futuro. Siempre hay una época de crisis, en la que el paso puede cambiar. Por lo que estar bien preparado ante las adversidades, siempre será un punto a tu favor.
- No existen fórmulas mágicas que garanticen los beneficios, porque nada sustituye a la buena gestión en el mundo de los negocios.
- El mercado siempre cambia, los gustos y la competencia siempre están en movimiento. Así que no podemos pensar que un mercado va a permanecer constante. De modo, que actúa siempre siendo consciente de que este principio puede darse.
- Hay que saber medir bien el éxito, porque muchos negocios en auge parece que funcionan por el mero hecho de que están llenos. Pero: ¿cuál es la rentabilidad de ese negocio? ¿Y el margen de beneficio?
- Normalmente la realidad suele ser la contraria, porque a veces todo es simple fachada. En la vida como en los negocios las personas a veces quieren aparentar algo que no existe. Como los famosos decorados de las películas del Oeste, donde tras la fachada no había más que desierto.